Todo el que tiene o ha tenido una moto, ha pensado alguna vez experimentar que se siente rodando en un circuito. Yo, obviamente, no iba a ser una excepción y desde que empecé a hacer mis primeros "pinitos", sobre una moto ya había comenzado a soñar con rodar en el mismo sitio que lo hacían todos nuestros ídolos.
Hoy en día y sobre todo en España, tenemos infinidad de posibilidades, para ponerlo en práctica, ya que disponemos de una gran cantidad de circuitos y de una calidad media-alta, no en vano, tenemos cuatro circuitos del Mundial de Moto GP, y otros tantos en muy buen estado de conservación. Hago desde aquí una llamada para que en Madrid exista un circuito como Dios manda, ya que el estado del Jarama no es todo lo que uno desearía.
Cuando uno adquiere una motocicleta, por primera vez, está claro que sabe mantener el equilibrio, engranar marchas, acelerar, frenar, etc..., pero en "modo básico" por decirlo de alguna manera, para pilotar hay que evolucionar mucho más, con el paso del tiempo y saliendo muchos fines de semana, vas adquiriendo cierta pericia a los mandos de tu montura, y porqué no decirlo a base de pegarte algún susto que otro, pero realmente si quieres aprender a pilotar una moto, tienes que entrar en un circuito. Quizás lo recomendable es que la primera vez que vayas a uno, lo hagas con un cursillo de conducción de cualquier motoclub, de los que hay muchas repartidos por nuestra geografía, y si no es posible, por lo menos con algún compañero que ya esté curtido, y te pueda ir corrigiendo alguno de los fallos o "vicios", que seguro, como todos, has adquirido siendo autodidacta.
De lo primero que te darás cuenta, es que no tienes que estar pendiente de si te sale una furgoneta por esa curva, o te vas a encontrar de repente con una viejecita cruzando la pista, no, sólo tienes que estar pendiente de ti y de tu moto. Observarás que el asfalto agarra mucho más que el de una carretera convencional y te permite hacer cosas que en una salida de fin de semana ni se te ocurriría pensar. Conviene que las primeras vueltas te lo tomes con tranquilidad, como seguramente no llevarás calentadores de neumáticos, a no ser que seas un semi-profesional, y por lo tanto esta entrada no te servirá de mucho, debes ir tanteando en las primeros metros los neumáticos, calentando en lo posible los flancos de los mismos, cuando lleves una vuelta, puedes empezar a aumentar el ritmo, no te piques, ve a tu ritmo, aumentándolo según te vayas encontrando cómodo, si te "picas" con otro, es posible que cometas algún error y te salgas de la pista, y cuidado, tú no tienes mecánicos para prepararte la segunda moto, si te caes, como mínimo, se te acabó la diversión. La finalidad de una rodada, es disfrutar y que tanto tú como tu compañera de dos ruedas volváis enteros a casa. En algunas rodadas existe la posibilidad de contratar alguna clase en una de las tandas con un profesor, para que éste te indique sobre todo, dos aspectos importantísimos, que quizás cuando salías los fines de semana nunca reparaste en ellos.
Primero, la postura sobre la moto debe ser relajada, con los codos semiflexionados, nunca rígidos, aunque vayas despacio debes acostumbrarte a marcar la postura sobre la moto y a trabajar encima de ella, debes sacar el culo hacia el interior de la curva y vencer el hombro más cercano a la curva hacia la rueda delantera, como me dijo mi amigo David, "como si te quisieras comer la pastilla de freno delantera".
Segundo, para acometer una curva debes ir por el exterior contrario a la siguiente curva, hasta el ápice de la misma, y una vez alli, "tirar" literalmente la moto hacia la curva, todo esto siempre con la velocidad que te permita hacerlo con decisión, si dudas y llegas demasiado deprisa, como mínimo te llevarás un buen susto.
Aunque perfectamente puedes disfrutar de un día de rodada sólo, lo ideal es ir con amigos, todo sale más barato, tienes que pensar en lo que necesitas para hacer la rodada, si no tienes un circuito relativamente cerca, necesitarás un carrito para llevar la moto, tendrás que reservar en algún sitio, cama para dormir la noche anterior, necesitas gasolina para aguantar toda la rodada, comida, bebida, (muy importante, para estar hidratado todo el día, normalmente la rodada se hace con buen tiempo y calor, después de varias tandas si no te hidratas en condiciones, puedes tener problemas). Lógicamente una equipación de motorista completa, Mono, casco, guantes, botas, etc... y si el mono es de cuero mucho mejor, es más, en algunas rodadas no te permiten el acceso con cordura, debe ser cuero, y lo más importante, tu moto tiene que estar bien revisada, recuerda que las presiones de los neumáticos deben ser inferiores a las que utilizas para circular por la calle, la cadena bien engrasada, que toda la tornillería este bien apretada, si puedes prescindir o desmontar fácilmente retrovisores y matrícula, házlo, es decir, todo en perfecto orden de revista, piensa que vas a someter a tu moto a una dura prueba y para que puedas disfrutar todo debe estar "ok".
Sólo añadir, que cuando vuelves a salir un fin de semana por carretera ordinaria, después de un circuito, en primer lugar, tus compañeros de salida "flipan", con tu mejoría y segundo, echas tanto de menos el circuito que cuando vuelves a casa, empiezas a organizar la siguiente rodada. Hacedme caso, si no lo habéis hecho nunca y tenéis posibilidades para hacerlo, aunque vuestra moto sea una turística, (en las rodadas siempre hay niveles para dar acogida a todo el mundo, con cualquier tipo de moto), disfrutaréis y vuestra forma de conducir evolucionará ostensiblemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario