jueves, 15 de marzo de 2012

Joyas de la era moderna, Honda NR 750

En toda la historia del motociclismo han surgido algunos modelos que han marcado un hito en su momento, pero bien es verdad que con la revolución tecnológica que se experimento en el mundo a partir de los años 70, la cantidad de modelos que dejaron una huella indeleble en la memoria de los aficionados aumento exponencialmente, también es verdad que como continuamente se generaban modelos nuevos la duración en el tiempo de su reinado, era bastante efímera. Con esta nueva serie de entradas, pretendo darles un minuto de gloria añadida a esos modelos que como en mi caso marcaron mi infancia, adolescencia y los primeros pasos en el mundo de las dos ruedas, y algunas que por su precio, soluciones técnicas o rareza sólo encontraban acomodo en mis sueños.
Me he pensado bastante que modelo iba a poner como pionera de esta categoría, pensé que debía ser un modelo que hubiese sido algo más que la sensación del momento, que no sólo hubiera llamado la atención por su diseño, sino también por su mecánica, su parte ciclo, etc... Y aunque había varias candidatas, al final me decante por la Honda NR 750.


Salvando las distancias, la NR para su época, año 1991, era como descubrir un teléfono móvil en la era de la Revolución Industrial, con una serie de soluciones a nivel estético y de Ingeniería casi 20 años adelantada a su época. Conviene no olvidar que Honda fue fundada por un Ingeniero y siempre ha estado dirigida por éstos, que le han dado siempre una importancia capital, a la innovación y al desarrollo, este afán de innovar y de dotar a sus modelos de la tecnología más puntera, fue la que les empujó a buscar un motor de cuatro tiempos que pudiera rivalizar con los mucho más apretados motores de dos tiempos. Como consecuencia de ello nació el proyecto NR500, que fue un sonoro fracaso, pero que le dio a Honda la suficiente experiencia con pistones ovalados, como para crear un motor de extremada complejidad. Tenía 32 válvulas, 8 varillas de conexión, 8 bujías y 4 pistones ovalados, su resultado... la suavidad más insultante jamas experimentada! Si bien es verdad que  al decidir Honda recortar la potencia máxima a 125 CV. su rendimiento final no era nada del otro mundo, sino nada más que unas buenas cifras para una moto de 750 c.c. de la época.


Eso sí, el conjunto que acompañaba al motor, era de verdadera ciencia ficción. Ruedas de magnesio, carrocería de fibra de carbono, la horquilla delantera presentaba un diseño totalmente novedoso en motos de Honda, invertida!, el parabrisas presentaba un tintado en titanio, basculante monobrazo, los indicadores de dirección delanteros integrados en los retrovisores, que locura!, doble salida de escape bajo el colín, panel de información y controles en cristal líquido, y para "rizar el rizo", la llave del contacto estaba hecha de plata niquelada y fibra de carbono. Toda esta demostración de tecnología y materiales exóticos, hizo que el precio de venta al público se elevara a extremos planetarios, su precio de salida era de 7.000.000 de las antiguas pesetas, 42.000,00€ pero con el nivel de vida del año 91, es decir sólo apta para millonarios caprichosos. Por cierto si estáis interesados en adquirir una, creo que el precio en el que rondan en la actualidad se acerca a los 95.000,00€.


Huelga decir, que las cifras de ventas de este modelo no fueron muy elevadas, al final la NR no era una moto para competir, ni a su propietario le regalaba un comportamiento radical, era otro concepto totalmente distinto, fue un ejercicio de ingeniería y diseño fantástico, que será muy difícil que se repita en el futuro, su finalidad no era otra que convertirse en una "Joya de la era Moderna".


Foto: Art & Revs website
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